Einar Goyo Ponte
Nos dice Josephine Bregazzi (Shakespeare y el teatro renacentista inglés, Alianza, 1999): "La figura de este rey se ha utilizado en numerosas ocasiones como epítome de lo que debía ser un soberano. La versión cinematográfica de Olivier de 1944, hacia finales de la Segunda Guerra Mundial, la manipuló descaradamente con fines propagandísticos, para levantar la moral ya mortecina del pueblo británico y, en honor a la verdad fue muy efectiva. Pero el retrato de Henry V que nos ofrece Shakespeare desde luego dista mucho del perfecto héroe nacional, del rey ideal o incluso del monarca justo."
Utilizando la información recopilada acerca de la figura histórica del rey Henry V, y la lectura (y/o la percepción del filme de Kenneth Branagh), responda en un máximo de una cuartilla: ¿cómo describiría al personaje de Henry V en su obra y en perspectiva respecto a Ricardo III?
Buenas tardes, profesor y compañeros. Disculpen la demora no tenía internet.
ResponderEliminarShakespeare, ciertamente, no propone a Henry V como un rey ideal, perfecto o en la cumbre moral sino que lo muestra en su drama como un monarca consciente de su mortalidad; del aspecto efímero del poder y de sus propias limitaciones así como también del honor de perseguir lo que cree justo y necesario. En efecto, Henry V es un personaje que se diferencia esencialmente de Ricardo III en un aspecto muy relevante: La presencia de una conciencia interna y de una reflexión profunda sobre la naturaleza real y efímera del poder. Para Ricardo III la conciencia es una suerte de enemiga que, aunque lo perturba y lo hace debatirse hacia el final de la obra, debe ser desechada totalmente para que el villano pueda continuar. En Henry V no es igual. En esta obra, la conciencia del Rey Harry imprime en él un carácter de monarca por el servicio y no por el afán del poder como lo era Ricardo III. Sin embargo, el conocimiento del deber por parte de Henry V implica una responsabilidad que destruye, independientemente de la antigua personalidad de un joven Harry, toda la vida anterior a un poder que lo obliga a asumir plenamente la condición de Rey imperturbable y sin afectos que menoscaben la justicia.
Por otro lado, hay que señalar también aquello que mueve a ambos personajes. Sin duda, a Ricardo III lo mueve la ambición por el poder que finalmente consigue mediante estratagemas y planes de los que nadie puede escapar. En contraste, a Henry V lo mueve perseguir lo que cree justo: conquistar el territorio francés que pertenece a Inglaterra por motivos de derechos de matrimonios. Visto así, no hay mucha cualidad virtuosa en este mero hecho, sin embargo, Shakespeare muestra a un joven Rey que se eleva desde su debilidad especialmente en la batalla de Agincourt (donde históricamente venció con todo en contra) y es esta la verdadera virtud de Henry V elevarse desde la debilidad a diferencia de Ricardo III que se elevaba desde la fortaleza de su posición conseguida y mantenida desde la maldad.
En conclusión, el Rey Henry V es representado por Shakespeare como un monarca que solo se separa del resto de los hombres por una cosa: el ceremonial propio de su condición, es decir, el aspecto teatral y ritualista de la existencia humana que se pone de manifiesto en la monarquía y que es símbolo de la misma existencia humana inundada de ornamentos como una gran representación teatral. A diferencia de Ricardo III, él se da cuenta de esta realidad y actúa desde dicha reflexión.
Habría sido interesante desarrollar un poco más este último aspecto psicológico del personaje. Buena descripción y comparación.
EliminarHenry V es la figura del rey ideal que lidera a sus seguidores como uno más de ellos, tratando de vivir en igualdad de condiciones aunque es superior. Es el rey que motiva y alienta a su pequeño ejército sin escapar de la realidad, puesto que no promete riquezas y ganar la batalla, pero cree en los suyos, en su coraje y disposición para seguir luchando por lograr sus metas. Y aunque este rey es amable y alentador, también hace notar su carácter sabiéndose moral ante los demás al justificar castigos valiéndose de ejemplos en acciones que debieran ser condenadas con la muerte; como el robo y la traición que algunos de sus acompañantes a la batalla se dignaron a cometer. Henry V da a entender a cada uno de ellos que sus acciones siempre serán responsabilidad de cada uno, no del rey, instándolos a tomar decisiones en nombre de su juicio y no del juicio del rey… Su arma más poderosa en ese momento de tomar decisiones se encuentra en el discurso, donde el ofrecimiento de la fama y el perdurar de sus nombres a través del tiempo, en la obra, vale más que miles de tesoros.
ResponderEliminarCon respecto a Ricardo III, Henry V es una figura contraparte. Ricardo III representa el rey villano, que convence a los demás para que cometan atrocidades buscando el propio beneficio; mientras que Henry V representa el rey respetado, moral y aceptado por buscar el bien colectivo, inclusive con aquel país que es su enemigo en la batalla; buscando en el compromiso con Catalina una alianza entre Francia e Inglaterra, en nombre de Dios principalmente. Sin embargo, son reyes que guardan cierto parecido porque ambos logran convencer a sus seguidores de acompañarlos en sus planes. Ricardo III, ofreciendo riquezas; Henry V, ofreciendo reconocimiento; el primero con fines personales; el segundo con fines colectivos.
Shakespeare ha entramado en ambas obras las figuras de reyes que deben o no ser, sin caer en lo clasificatorio del bien o el mal, de lo aceptable o no; esos juicios quedan de parte del espectador. Lo curioso en estas obras es el trabajo de sensibilización que realiza el autor al mostrar la historia de los reyes a partir del sentir humano, más allá de la transformación de un rey en una figura insensible e intocable.
¡Acá, un material muy interesante sobre el tema tratado en este post!
ResponderEliminarfile:///C:/Users/Carla/Desktop/Dramaturgia%20de%20Shakespeare/del-Prado-Luis-El-liderazgo-y-el-poder-en-los-reyes-de-Shakespeare.pdf